Con un título así, debo partir aclarando que este Recurso mágico en forma de blog no pretende ser un compendio enciclopédico sobre las prácticas mágicas ancestrales egipcias, más bien una contextualización sobre lo que hoy llamamos Magia.
En Egipto ancestral eran prácticas rituales complejas en busca de contacto con los otros mundos y la exaltación humana a todo su potencial.
Así entonces, la información oficial y pública sobre las prácticas mágicas egipcias, se encuentran en el llamado “El libro de los muertos”, del que apenas tenemos referencias y un solo papiro muy bien conservado escrito por un escriba, por lo tanto, entendible para los estudiosos.
Esto es de conocimiento público hace más de un siglo, pero también por medios no convencionales y orales en su mayoría, conocemos la existencia de agrupaciones filosóficas, mágicas herméticas, que se han hecho de mucho conocimiento ancestral desde los primeros tiempos.
De este modo, mucho conocimiento secreto, guardado cuidadosamente, se ha ido filtrando y emanando hacia el plano akashico, dejando paquetes de información disponibles para ser canalizada por quien desee y esté buscando.
Así, quienes nos interesamos por los orígenes del conocimiento mágico, entendemos ahora que las prácticas del sacerdocio ancestral egipcio, contenían todo lo que hemos estado buscando como colectivo, la exaltación, el encuentro con el máximo potencial y respuesta a las preguntas de siempre, quien soy, quienes somos, que somos, hacia a donde vamos, que es la vida, que es dios, que es el karma.
Prácticas rituales en correspondencia con todos los elementos del mundo natural, colores, formas, aromas, días y horas, regencias, planetarias y zodiacales, regencias angelicales y numéricas, sonidos, danza, vocalizaciones, instrumentalización, poder mental, cruce dimensional.
En algunas de las prácticas orientadas a obtener, emanar, dirigir o absorber energías, se usaban instrumentos al igual que hoy, varitas, martillos, velas, y tanto más, el sacerdocio se armaba de elementos rituales de sonido, de vibración, de respiración y todas las variables para las diferentes prácticas.
El más conocido de estos instrumentos rituales es la Crux Ansata, o Cruz de Ankh, pero existen muchos más.
Debido a la naturaleza ritualista y en conexión con el entorno natural de quienes ostentaban este conocimiento, los objetos rituales alcanzaban una importancia mucho más que decorativa, eran el elemento clave para la conexión terrenal con los procesos mentales.
Un objeto ritual puede dirigir, cortar, emanar o absorber, según las formas y magnetización que se le ha entregado.
Por tanto, la consideración de que algunos de estos elementos rituales pueden estar en conexión con la alquimia de aromas es razonable y esperable, atendiendo al hecho de que las prácticas secretas mágicas., estaban orientadas a aprender, se practicaba no sólo para mejorar las técnicas, sino para incorporar nuevas.
Es por esta razón que preparamos el curso de Cruz de ankh y sus aceites mágicos, bajo el entendido que nadie más ha hecho esta conexión tan profunda entre los procesos de alquimia aromática y las fuerzas del mundo natural dirigibles con la cruz de Ankh.
El sacerdocio egipcio estaba compuesto por personas de ambos sexos, que eran preparados desde edades específicas en su infancia en un proceso evolutivo de aprendizaje superando niveles o etapas de crecimiento y conocimiento, hasta alcanzar en una edad adulta las características necesarias para guiar a otros y mantener la línea de guardadores de las practicas mágicas.
El chamanismo, el poder mental, la filosofía y las matemáticas, la música y la botánica, las artes plásticas y la medicina, eran todas áreas que el sacerdote o sacerdotisa debían dominar.
Se trataba de personas de mucho conocimiento, serían como académicos de gran prestigio, con la gran diferencia de que los primeros eran eruditos en conocimiento y sabios en prácticas de consciencia y alquimia, manteniendo un equilibrio entre el mundo terrenal externo y el mundo divino interno.
Para resumir y cerrar, la magia ancestral egipcia probablemente era a su vez depositaria del conocimiento que provenía de otras civilizaciones avanzadas mucho antes que ellos, en un proceso de Uroboros, Alpha y Omega perpetuo, o Rueda del Karma.
Entre otras cosas, el sacerdocio buscaba las respuestas en su interior, entendiendo que el mundo natural era una ilusión, y que de no aprender volverías al sufrimiento.
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• Blog – Categoría Magia – Aceites Sagrados Egipcios
• YouTube – Podcast – Aleister Crowley
• YouTube – Programa a la luz del ermitaño, invitada Marisol Peñafiel
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